Comodidad del paciente hospitalizado en una unidad de cuidado intensivo cardiovascular

Publication year: 2016

La enfermedad cardiovascular es una condición de salud que afecta de manera importante a la población colombiana. Cuando hay deterioro importante de la función cardiovascular, se requiere de la hospitalización en una Unidad de Cuidado Intensivo cardiovascular (UCI) a fin de realizar vigilancia y cuidados especiales para la supervivencia. Esta presencia en la institución genera sensaciones de incomodidad a nivel físico, psicológico, espiritual o social. Por lo tanto, la enfermería como disciplina profesional, que provee cuidado a estos pacientes, se encuentra interesada en conocer de manera amplia la comodidad que vivencia el paciente, en virtud de que este es un fenómeno complejo y multidimensional. Los niveles afectados antes señalados demuestran la importancia que ejerce un cuidado humanizado de enfermería a los pacientes hospitalizados y a sus familias, sobresaltando el respaldo que se le debe dar al favorecimiento de las medidas de confort, basadas en brindar alivio, tranquilidad y trascendencia.

Objetivo:

Describir la comodidad del paciente adulto hospitalizado en una Unidad de Cuidado Intensivo cardiovascular.

Diseño:

El presente estudio tiene un enfoque mixto, cualitativo-cuantitativo de ejecución concurrente, lo que implica el desarrollo de un estudio cualitativo y la recolección de datos cuantitativos de manera paralela para realizar al final un análisis independiente, pero que confluye en un análisis mayor.

Resultados:

La muestra total fue de 45 personas a quienes se les aplicó el instrumento de Confort de Katharine Kolcaba en la Unidad de Cuidado Intensivo cardiovascular del Hospital Universitario San Ignacio de Bogotá en el mes de diciembre de 2015 y enero de 2016, con un porcentaje mayor de hombres del 73% y de mujeres del 27%. De las entrevistas, surgieron seis categorías y dieciséis códigos dentro de las expresiones de los pacientes hospitalizados. Los factores que alteraron la comodidad están relacionados con una percepción de no poder realizar alguna actividad cotidiana como moverse, comunicarse, alimentarse (ya sea por dolor e inmovilidad), el sentirse encerrado, percepción de mucho ruido o el tener que hacer sus funciones corporales ante personas desconocidas. Dentro de los factores que mejoran su comodidad, se encuentra el poder contar con el apoyo de alguien externo a la misma persona, ya sea apoyo espiritual o de otro individuo, como puede ser la familia, los amigos o el mismo personal asistencial, lo cual es de gran importancia al estar hospitalizado. Los resultados generales del cuestionario GCQ lograron evidenciar el cubrimiento de las necesidades de comodidad en un nivel medio-alto y alto por una respuesta mínima de 131 puntos, máxima de 159 puntos con un promedio que se ubica en un estado alto de comodidad con 146,07 puntos, con desviación estándar de 7,23.

Conclusiones:

El contexto físico es el más comprometido debido a los sentimientos de pudor que se generan por las ideas o preconceptos que la persona tiene sobre las funciones corporales, en especial con actividades íntimas como el tener que realizar funciones fisiológicas o actividades como el baño frente a personas desconocidas y con elementos de uso poco común, como el recolector de orina o coprológico. Sin embargo, los pacientes refieren su agradecimiento al contar con personal entrenado y consciente de su proceso de enfermedad. Por su parte, los pacientes acogen un acompañamiento espiritual de un ser superior que los hace sentir protegidos y los hace conscientes de buscar en la oración una forma de fortalecimiento. El acompañamiento médico y de enfermería con información acertada y oportuna brinda al paciente confianza en sus medidas de tratamiento. Además, la importancia del apoyo de la familia y amigos los hace sentir bien, amados y les da fuerza para seguir adelante con su recuperación. Las políticas institucionales incentivan a sus trabajadores a brindar un servicio humano, seguro y eficiente. Dentro del contexto ambiental, el ruido de los monitores y del ambiente de la Unidad de Cuidado Intensivo repercute en el descanso y tranquilidad del paciente. Así mismo, el espacio físico de la UCI favorece la intimidad y el recogimiento para pensar, brindar tranquilidad y paz. Un ambiente agradable en una Unidad de Cuidado Intensivo, por ende, es un aspecto importante en la consecución de la comodidad: una habitación amplia e iluminada además de una cama suave y blanda son condiciones que hacen más fácil la estadía en un servicio de salud de alta complejidad.
The cardiovascular disease is a health condition that affect in an important grade the people in Colombia. When there is a important damage in the cardiovascular function, it is required a hospitalization in the cardiovascular intensive care unit (ICU) in order to do the watchfulness and the special care to the survival, the institution generate uncomfortable sensations in physical, psychological, spiritual and in a social way. The nursery like a profession that give care to the patients it is interested in to know in a wide way the comfort the lives the patient because this is a complex and multidimensional phenomen. The above affect levels show the importance that apply the human care of the nursery in the hospitalized patients and their families, it is important the support that must be applied to the priority in the measures to improve the comfort based in bring relief, tranquility and transcendence.

Objective:

To describe the comfort of hospitalized adult patients in a cardiovascular intensive care unit.

Design:

The present study has a mixed, qualitative and quantitative approach to concurrent execution, implies the development of a qualitative study and the collection of quantitative data in parallel to perform an independent analysis at the end, but which converges in a larger analysis.

Results:

The total sample consisted of 45 people who were given the Katharine Kolcaba Comfort Instrument in the cardiovascular intensive care unit of the San Ignacio University Hospital in December 2015 and January 2016. With a higher percentage of Men of 73% and women 27%. From the interviews, six (6) categories emerged, and sixteen (16) codes within the expressions of hospitalized patients. The factors that alter comfort are related to a perception of not being able to perform some daily activity such as moving, communicating, feeding either by pain and immobility; Feeling closed or perceived as loud or having to do their bodily functions in the presence of unknown people. Among the factors that improve their comfort is that being able to count on the support of someone external to the same person, whether spiritual support or another individual such as family, friends, or the same care staff it has a big importance in comfort when being hospitalized. The overall results of the GCQ questionnaire were able to show the coverage of comfort needs in a medium-high level and high for a minimum response of 131 points, maximum of 159 points with an average that is in a high comfort state with 146.07 points, with a standard deviation of 7.23.

Conclusions:

The physical context is the most compromised due to the feelings of modesty that are generated by the ideas or preconceptions that the person has on the bodily functions, the having to perform physiological functions or activities such as the bath in front of unknown people and with elements of uncommon use like the urine collector or coprological, nevertheless they refer their gratefulness to having personnel trained and aware of their disease process. The patients receive spiritual accompaniment from a superior being who makes them feel protected and makes them aware of seeking in a pray a form of strengthening; The medical and nursing accompaniment with accurate and timely information gives the patient confidence in his treatment measures. The importance of the support of family and friends makes them feel good, loved, gives them strength to continue with their recovery. Institutional policies encourage their workers to provide a safe, efficient and humane service. Within the environmental context, the noise of the monitors and the environment of the intensive care unit has repercussions on the rest and tranquility of the patient. Likewise, the physical space of the ICU favors the intimacy and the recollection to think, offering tranquility and peace.

A pleasant physical environment in an intensive care unit is an important aspect in achieving comfort:

A spacious, bright room, a soft bed, are conditions that make it easier to stay in a high complexity health service.